Los dientes excesivamente sensibles causan estímulos dolorosos agudos. Aunque de corta entidad, estos estimulos se perciben con considerable violencia.
La hipersensibilidad de los dientes se produce durante el contacto de los dientes con alimentos dulces, amargos, calientes o fríos, o durante el cepillado (limpieza) o masticando muy enérgicamente.
Las causas pueden ser diferentes, de tipo fisiológico o patológico. El tratamiento es diferente dependiendo del agente desencadenante.
El material publicado tiene por objeto permitir un acceso rápido a los consejos, sugerencias y remedios generales que los médicos y los libros de texto suelen dispensar para el tratamiento de los dientes sensibles. Estas indicaciones no deben sustituir en modo alguno la opinión del dentista.
Qué hacer
Lo primero que hay que hacer en caso de dientes sensibles es la búsqueda de la causa primaria. A veces se puede identificar independientemente (delante del espejo), en otros casos es necesario ir al dentista.
El dentista podría identificar un malestar que cae dentro de la normalidad:
- Retracción gingival leve.
- Erosión del esmalte.
- Predisposición individual.
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O una complicación patológica:
- Caries
- Grietas en los dientes.
- Desforre de las raíces de los dientes y de los bolsillos periodontales.
En caso de caries, fisuras dentarias, bolsillos periodontales o desforres de raíces la única solución es un trabajo dental.
En el caso de una retracción gingival leve, puede ser suficientemodificar la frecuencia de limpieza y cambiar el tipo de cepillo de dientes o hilo dental.
- Determinar con precisión cuál es la técnica de cepillado correcta no es fácil. Las recomendaciones cambian periódicamente.
- El movimiento es vertical (para ambos lados de los arcos), nunca horizontal. Comienza desde el cuello de los dientes y procede hacia el ápice, sin invadir el arco opuesto.
- Un movimiento horizontal se aplica sólo a las superficies masticadoras de premolares y molares.
- La frecuencia óptima de limpieza es después de cada comida.
- Tipo de hilo dental: puede ser encerado o no encerado, dependiendo del uso (remoción de sarro o placa, dientes cercanos o torcidos, etc.). Es necesario tener mucho cuidado de no lesionar las encías.
- Tipo de cepillo de dientes: el más eficaz con cabeza corta y con las cerdas suaves
- En caso de erosión del esmalte:
- Lavar los dientes después de al menos media hora de la comida y no inmediatamente, para evitar la acción de los ácidos contenidos en el alimento.
- Usa poca pasta de dientes.
- Tratar cualquier enfermedad de reflujo gastroesofágico.
- Evitar el roce entre los dientes inducidos por el bruxismo.
Qué no hacer
- Ignorar la sensibilidad dental, especialmente cuando es muy intensa y localizada.
- Curar la aparición de caries:
- Dieta incorrecta.
- Limpiar los dientes de manera insuficiente o incorrecta.
- Favorecer el agrietamiento de los dientes:
- Comer alimentos duros y tenaces.
- Uso de los dientes para cortar, romper o apretar objetos.
- Descuidar la inflamación y la retracción de las encías.
- Consumar alimentos que puedan dañar los dientes mecánicamente.
- Ignorar las patologías de las encías (infecciones, bolsillos profundos, etc.).
- Comer muchos alimentos amargos.
Tratamientos
Los tratamientos médicos para tratar los dientes sensibles están dirigidos a eliminar la causa desencadenante:
- Curarse las caries.
- Tratamiento endodontico, o recubrimiento estético en caso de fractura.
- Cirugía periodontal (gingival) en caso de bolsillos periodontales y desforre de raíces.
- Aplicación profesional de componentes fluoradas (fluor) que sellan los túbulos dentinarios en caso de hipersensibilidad fisiológica o erosión del esmalte.
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